Rafael Correa niega golpe de Estado en Ecuador, pero exige convocar a elecciones anticipadas
Correa, que es requerido por la Justicia de su país por distintos casos de corrupción, aseguró que el adelanto de las elecciones está contemplado en las leyes de su país para casos de "conmoción social".
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El expresidente de Ecuador Rafael Correa aseguró este martes que las protestas callejeras en su país no responden a ningún "golpe de Estado" y pidió la celebración de elecciones anticipadas para solucionar el problema.
"Nos llaman golpistas cuando llevamos dos años de la peor persecución política. Aquí no hay golpistas, los conflictos en democracia se resuelven en las urnas", dijo el exmandatario en un vídeo difundido por redes sociales.
Se refería a la acusación que hizo el lunes el presidente Lenín Moreno, quien dijo que la actual ola de protestas en las calles ecuatorianas se origina en elementos externos alentados por el correísmo.
Correa, que gobernó Ecuador entre 2007 y 2017 y está requerido por la Justicia de su país por distintos casos de supuesta corrupción, aseguró que el adelanto de las elecciones está contemplado en las leyes de su país para casos de "conmoción social" y que, de celebrarse, "el resultado será más contundente que en las calles".
Ecuador vive desde la semana pasada una ola de disturbios y protestas a raíz de la cancelación del subsidio a las gasolinas, una decisión que Moreno adoptó para incrementar los ingresos del Estado y, con ello, satisfacer las demandas del FMI.
Esta institución, así como otras internacionales, concedieron recientemente al país a una línea de crédito de más de US$ 10.000 millones.
Correa describió las medidas de Moreno como un "paquetazo" que no era necesario porque "no ha caído el precio del petróleo, ni ha ocurrido ningún desastre natural".
"Es pura corrupción e ineptitud, mientras ellos se reducen sus impuestos", afirmó el exmandatario que reside en Bélgica y no puede regresar a Ecuador porque iría a prisión inmediatamente por violación de medidas cautelares.
Como en sus días de Gobierno, el exmandatario criticó duramente a la prensa y a los partidos de antaño como responsables de la situación en su país, y calificó a Moreno como "el mayor farsante de nuestra época".
"Han destrozado la patria, pero nos levantaremos, seguiremos adelante", dijo en su mensaje.